miércoles, 29 de febrero de 2012

Le dieron un tiro a Juancho


Hace al menos 15 años -o más-, mis primas, Kitty y Yessy, y sus novios, Kike y Eli, junto a Juancho, tenían una bandita llamada "Dejavú". A mi me encantaba! Era una banda hecha de muchachitos talentosos que hacían covers de Alanis y Cranberries (su versión de Dreams solía gustarme más que la original, y eso es mucho decir), y de vez en cuando se animaban a presentar sus propias canciones en público. Yo los seguía donde se presentaran, en Toma 2, el Concresa, Plaza Las Américas...a veces arrastraba a algún amigo que solía disfrutar de esos "toques" tanto como yo. Cuando otra persona disfruta de lo que haces, tiene que serte reconocido algún talento.
Esos muchachitos crecieron, dejaron la música, estudiaron una carrera y se convirtieron en "ciudadanos adultos, comunes y corrientes"...una Licenciada en Idiomas, una Licenciada en Educación, un médico y otro, creo, Licenciado en Administración...o algo así.
Hace mucho que no veo ni a Kike (el otrora novio de Kitty), ni a Eli (el ex esposo de Yessy)...la última vez que vi a Kike, casi no lo reconocí. Pelo corto, barrigón, médico...y de eso hace ya muchos años. Pero de Juancho, no recuerdo ni su cara...recuerdo su nombre en el medio de los otros, como integrante de "Dejavú"...Juancho, un nombre sin rostro, el pana de mis primas...
Si le hubieran dado un tiro a Kike o a Eli, yo ni estaría enterada...habiéndose convertido en ciudadanos adultos, comunes y corrientes, formarían parte de una estadística sin nombre y sin rostro...el pana de cualquiera...la normalidad a la que nos hemos acostumbrado, otra noticia de sucesos en la tele.
El lunes me enteré tarde de un suceso que, además de engrosar la estadística, tiene mayor cobertura noticiosa por tratarse de una figura pública. Al comentarlo, me dijo Yessy: "Ese es Juancho, el que tocaba con nosotros en la banda!"...finalmente Juancho tuvo rostro...se trataba de OneChot.

Más que #FuerzaOneChot, habría que decir #FuerzaVenezuela...cada número que engrosa la estadística de las víctimas del hampa, es un pana, el pana de un pana, un familiar, alguien que tal vez conociste, alguien que no conocerás nunca, un venezolano. ¿Hasta cuándo?

Foto: Ricardo Crovato
"Donde el malandro llena de sangre la calle con plena libertad y el venezolano común lo paga en una jaula de concreto"